Un reflejo de calidez y armonía.

En este proyecto hicimos uso de la estética francesa. El cuarto de televisión refleja el estilo parisino típicamente colorido con una combinación de colores intensos pero armoniosos en su mezcla; en los textiles se aprecian diferentes estampados y texturas. Se agregó  un toque asiático a las lámparas para añadir un matiz de simpleza y luminosidad. Como es de notar, esta iluminación siempre da un efecto cálido. El tema continúa en la recámara, donde se plasma el sabor único de la Provenza francesa: colores suaves y cálidos, estilo elegante, mezcla de materiales como madera y textiles con estampados de figuras naturales y un toque de antigüedad en algunos muebles y accesorios. Cómo olvidarnos de un sillón tan clásico como el Berger, que invita a leer durante horas o sólo disfrutar de una buena siesta.